Las paredes hacen de este local una experiencia en sí misma, sin tener en cuenta la pizza. Verás mucha gente moderna, artistas sin dinero, recuerdos del cine, TV y muchos famosos (al menos en la pared). Aquí puedes comprar porciones o una pizza entera, que puedes compartir fácilmente entre dos o tres personas. Puedes pedir un slice en la barra, donde te darán un plato con tu elección, que devorarás inmediatamente. Puedes pedir una pizza de serie con 4 quesos, una margarita o una española: todas tienen la corteza fina y crujiente, además de mucho queso. Además, lo mejor es la salsa de tomate, con el equilibrio perfecto. Puedes añadir muchos ingredientes variados, como Pepperoni, anchoas, crema o miel.